El pegging es una práctica sexual en la que una mujer penetra a su pareja masculina. Esta sodomía femenina se realiza generalmente con un consolador. Un juego de rol que permite experimentar nuevas sensaciones y durante el cual la mujer se convierte en penetradora.
¿Qué es el pegging?
A menudo colocado erróneamente en la categoría de prácticas SM (sadomasoquistas), el pegging se refiere a un coito anal durante el cual la mujer se convierte en la que penetra a una pareja heterosexual.
Mediante el uso de un juguete sexual como el consolador, se invierten los roles tradicionales, sin que se establezca necesariamente una noción de dominación o de dolor para alcanzar el placer. De hecho, el pegging es sobre todo una forma de explorar y estimular zonas erógenas del hombre como la próstata.
Placer físico para él, placer psicológico para ella, el hecho de que una mujer penetre a su pareja, ya sea con un consolador o con los dedos, es también una forma de liberarse de las representaciones de género y de transgredir una forma de prohibición.
¿Cómo practicar el pegging sin tabúes?
La penetración femenina sigue siendo el centro de muchos tabúes y preguntas sobre la orientación sexual. A algunas parejas les puede resultar difícil salir de los juegos de roles preestablecidos de nuestras sociedades. Para muchos, el placer anal en los hombres llevará a cuestionar la homosexualidad.
Si el pegging es una práctica que te tienta, empieza por hablar de ello con tu pareja. Este debate servirá para deconstruir los tópicos que rodean a la penetración femenina y para abordar el hecho de que el ano es una zona erógena que puede multiplicar por diez el placer para algunos hombres. Esto fomentará la confianza en su relación y abrirá la puerta a nuevas formas de descubrir el placer sexual.
Comprar los accesorios adecuados para el pegging
El pegging suele hacerse con un consolador con correa. Para una primera experiencia, se recomienda utilizar un sextoy de tamaño estándar, incluso un poco más pequeño que la media, para evitar un posible desgarro o lesión anal.
También debes pensar en el lubricante, porque a diferencia de la vagina, el ano es una zona que no produce lubricación natural.

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Introducción suave al pegging
Antes de un acto anal, se recomienda centrarse en los juegos previos. Prepara la zona suavemente, primero con los dedos, antes de introducir gradualmente el juguete sexual con la ayuda de lubricante. El movimiento de penetración por parte de la mujer no será necesariamente natural.
A menudo son necesarios varios intentos antes de encontrar el placer esperado. El miedo a herir, la dificultad para encontrar el ritmo, el pegging requiere una buena comunicación y paciencia entre los dos miembros de la pareja.
El ano, una de las principales zonas erógenas de los hombres
El punto G masculino, también conocido como punto P, se encuentra en el interior del recto, cerca de la uretra y la próstata. Esta zona erógena que rodea la próstata está especialmente inervada, por lo que la sodomía puede provocar un placer muy intenso.
Mientras que la penetración anal puede ayudar a un hombre a alcanzar un orgasmo prostático, el uso de un consolador también puede estimular el clítoris y provocar un orgasmo en la mujer.
Precauciones
- Utiliza un buen lubricante antes de iniciar el sexo anal
- Masajear y penetrar suavemente en la zona para evitar el riesgo de desgarro
- Tenga una higiene estricta, ya que el ano y el recto pueden ser zonas portadoras de gérmenes
- Limita el uso del consolador a la zona anal. Para cualquier otra penetración, oral o vaginal, recuerda limpiarlo bien
- Limpiar a fondo el consolador después de cada encuentro sexual